Colchones Enrollados

La rapidez con la que un colchón enrollado recupera su forma original depende de muchos factores, pero sobre todo del tiempo que haya estado envasado al vacío y de la calidad de sus materiales. Por eso es importante abrir el colchón en el plazo que marca el fabricante y que suele venir indicado en algún lugar en el envoltorio o en alguno de los etiquetados del colchón. La media de recuperación de un colchón enrollado oscila entre 4 y 6 horas, de manera que si el usuario recibe su colchón, en la mayoría de ocasiones suele poder dormir sobre su colchón nuevo esa misma noche.

Una opción que cada vez eligen más usuarios y que ofrece excelentes resultados de recuperación en colchones enrollados de alta gama, es su enrollado bajo pedido. Es decir, que si el cliente solicita en el pedido, la versión de uno de estos colchones con la Opción de Envío Exprés, el fabricante, una vez recibe el pedido enrolla el colchón y lo manda directamente al cliente. De esta forma, el colchón sólo permanecerá enrollado durante unos días y en menos de dos horas habrá recuperado su forma y volumen originales.

El tiempo que un colchón envasado al vacío puede estar en su envoltorio sin abrirse, depende exclusivamente de lo que indique el fabricante. Sería lo más parecido a la ‘Fecha de Consumo Preferente’ en un colchón. Es en los controles de calidad de las fábricas, donde se realizan los tests y pruebas de recuperación de materiales y donde se establecen los plazos de apertura preferentes. Por eso es muy importante que cuando recibas un colchón enrollado, te asegures de que se encuentra en el plazo establecido por el fabricante para su apertura. Sólo así el colchón cumplirá los objetivos en cuanto adaptación y firmeza de sus materiales, para los que ha sido diseñado.

El proceso de abrir un colchón enrollado puede parecer una obviedad, pero lo cierto es que si no lo hacemos con cuidado, podemos estropear el colchón. Nuestro truco, es hacerlo siempre sobre la base o canapé donde finalmente se va a colocar el colchón. Esto ayudará a que pueda recuperar su forma original lentamente, en una superficie lisa y uniforme. Luego es importante ayudarnos de algún objeto que corte (aunque no demasiado) para poder romper la primera parte del plástico que lo envuelve, pero sin llegar a rajarlo del todo. Una vez que hayamos roto un poquito el plástico, lo ideal es terminar de romperlo rasgándolo con las manos. Si vemos que no podemos, podemos ayudarnos puntualmente de un ligero corte con el cuter o con una tijera, pero no recomendamos abrirlo del todo con ninguna de estas herramientas, ya que una vez que cojamos velocidad, es muy fácil que acabemos cortando más de lo debido, con el riesgo de poder rasgar el colchón.

Los colchones enrollados, como su propio nombre indica, son aquellos que tienen la capacidad de comprimirse en forma de rollo para reducir su tamaño, con el objetivo de poder ser transportados con mayor facilidad.

Generalmente, esto es útil cuando deben ser transportados en cualquier circunstancia, especialmente en aquellas que requieren desplazarse entre espacios estrechos.

A diferencia de los colchones convencionales, los enrollados requieren un tiempo de adaptación algo superior tras su desempaquetamiento para dar lugar a que los materiales se expandan, pero con respecto a la calidad del descanso que pueden llegar a ofrecer, ofrecen las mismas que los convencionales.

No es recomendable enrollar un colchón que ya haya sido desenrollado de su forma original, ya que están fabricados con el objetivo de ser enrollados una única vez. Debe tenerse en cuenta que el proceso de ser enrollados se lleva a cabo mediante maquinaria especializada, garantizando que la integridad del material no se vea dañada de ningún modo.

Al mismo tiempo, cuando se expande un colchón enrollado, los materiales se despliegan del modo apropiado, sin embargo un segundo despliegue o compresión podría implicar que se comprometa el correcto reparto y rendimiento del colchón, causando deformidades, incomodidad e incluso afectando a la durabilidad del colchón enrollado.

Efectivamente, la facultad de enrollar un colchón no es atribuible únicamente a aquellos de determinados tamaños, y puedes encontrarlos en diferentes: colchones enrollados 135x190, colchón enrollable 90x190, etc.

Puedes encontrar colchones convencionales más caros que enrollables, y también enrollables más caros que los convencionales: depende del producto y el fabricante. Si estás en busca de un colchón enrollable barato y, al mismo tiempo, de máxima calidad: has llegado al lugar adecuado.

En Colchón Exprés ofrecemos un catálogo de los mejores colchones enrollables de la máxima calidad, con independencia de su precio. Te invitamos a que los revises detenidamente, y que contactes con nosotros en el caso de que tengas alguna duda acerca de la elección del colchón enrollable más apropiado para tus necesidades.

La rapidez con la que un colchón enrollado recupera su forma original depende de muchos factores, pero sobre todo del tiempo que haya estado envasado al vacío y de la calidad de sus materiales. Por eso es importante abrir el colchón en el plazo que marca el fabricante y que suele venir indicado en algún lugar en el envoltorio o en alguno de los etiquetados del colchón. La media de recuperación de un colchón enrollado oscila entre 4 y 6 horas, de manera que si el usuario recibe su colchón, en la mayoría de ocasiones suele poder dormir sobre su colchón nuevo esa misma noche.

Una opción que cada vez eligen más usuarios y que ofrece excelentes resultados de recuperación en colchones enrollados de alta gama, es su enrollado bajo pedido. Es decir, que si el cliente solicita en el pedido, la versión de uno de estos colchones con la Opción de Envío Exprés, el fabricante, una vez recibe el pedido enrolla el colchón y lo manda directamente al cliente. De esta forma, el colchón sólo permanecerá enrollado durante unos días y en menos de dos horas habrá recuperado su forma y volumen originales.