Cuando los niños crecen y se convierten en adolescentes empiezan a querer manifestar sus gustos y personalidades a través de la ropa, sus dormitorios… Dejan atrás los estilos más infantiles para experimentar con otros más «adultos". Los edredones juveniles son una excelente forma de cambiar el look del dormitorio sin realizar grandes inversiones ni cambios.
Edredones juveniles para todos
Los jóvenes hacen de sus dormitorios sus reinos. Son sus espacios personales, donde pueden pasar tiempo de ocio, con amigos, estudiando… La adolescencia es una época complicada donde necesitan independencia e intimidad, por eso es importante crear un espacio a su medida.
Además, el uso de edredón hace que la tarea de hacer la cama sea más sencilla y rápida, por lo que es más fácil mantener un aspecto ordenado en su cuarto.
En cuanto a los materiales, podemos encontrar edredones nórdicos de distintos rellenos: sintéticos, pluma y plumón… O podemos decantarnos por edredones completos, en cuyo caso será necesario usar una sábana encimera.
Edredones juveniles románticos
Muchas chicas al llegar a esta etapa, prefieren los estilos románticos. Tonos pastel, estampados muy suaves… Rosas pálidos, grises, verdes menta… Tejidos naturales y muebles lacados en blanco o decapados. Crearán así ambientes relajantes, tranquilos y muy femeninos.
Edredones juveniles masculinos
Para los chicos, lo que suele elegirse son colores más oscuros. Azul marinos, verdes, rojos… Ambientes más «de hombre", que les hacen sentirse mayores y fuertes. Atrás quedan los coches, las naves espaciales y los piratas. Edredones con estampados sobrios son los más adecuados para esta etapa.
Nuestro consejo
En nuestra opinión, la mejor opción para estas etapas es elegir edredones nórdicos con distintas fundas. Esto permite por un lado, prescindir de la sábana encimera, y por otro cambiar más a menudo el aspecto de la habitación. De esta forma, si pasado un tiempo los gustos del adolescente cambian, la inversión será mínima y el resultado estupendo.