Por fin llega la semana santa. Ha sido una espera muy larga y ahora por fin podemos disfrutar de unos pocos días para descansar, recuperar un poco las fuerzas, y reunir la energía para aguantar hasta que llegue el verano.
Para muchos la semana santa es ideal para hacer turismo y conocer sitio nuevos, y para otros son unos días muy importantes para poder descansar un poco, ya sea en casa sin salir de viaje o yendo a algún sitio relajado. Para todos os comentamos unos cuantos trucos para que recarguéis bien las pilas.
- Preparación del equipaje: No esperes al último momento para preparar las maletas, comprar los billetes, o revisar que el coche esta en perfecto estado. Empezar con estrés o con preocupaciones nos hará perder un tiempo valioso de viaje y de relajación.
- Aprovecha el viaje: Viajar puede ser un placer si sabemos tener una mente despejada, y sin tensión. Recuerda que estas de vacaciones, y que lo más importante es que no hay que tener prisa para nada. El viaje son unas horas donde se puede disfrutar de la familia, del paisaje, o de dormir un poco si eres un pasajero. Y si eres de los que te duermes en cualquier sitio recuerda que es importante utilizar algún tipo de soporte para el cuello, por ejemplo la almohada viscoelástica de carbono, cuyas propiedades de control de temperatura y humedad son idóneos para cualquier sitio.
- No romper tu rutina: No por levantarse a las 12 de la mañana conseguimos descansar más. Es más, lo único que conseguiremos es romper nuestro ciclo de descanso y hacer que la vuelva a la rutina nos cueste mucho más. Hay que intentar mantener las horas de acostarse y levantarse lo más cercanas posible a nuestra vida normal.
- Vigila donde duermes: Tanto si duermes en un hotel como en un apartamento, propio o alquilado, es muy importante valorar el colchón donde vas a dormir los próximos días. Si el colchón no esta en buenas condiciones, o no es adecuado para tu peso,altura y forma de dormir, ya puedes olvidarte de cumplir con tus objetivos de descanso.
- Intenta evitar tener exceso de planificación y horarios: Un día demasiado planificado, o con muchas cosas por hacer, es un día con estrés, y eso es lo último que queremos. Tener pocos objetivos y horarios, hace que todo se haga con mucha más calma, y esa relajación es la que hechamos de menos en el día a día. Nada es obligatorio, y si algo no se puede hacer es perfecto.
Son trucos básicos que son muy fáciles de seguir para todos. La mejor forma de descansar en semana santa, es un buen colchón, tomarse las cosas con calma, y disfrutar.