Es fundamental llevar a cabo ciertas técnicas para relajarse cada día. El trabajo, las obligaciones, la casa, los niños… A veces es muy difícil desconectar de todas esas cosas al final del día. Cuando no conseguimos calmar nuestra mente y cuerpo, llegan también los problemas en el descanso. Tener el mejor colchón del mundo nos ayudará a descansar mejor, pero si no somos capaces de conciliar el sueño nos levantaremos cansados e irritables.
Todos deberíamos tomarnos cada día el tiempo de cambiar a tareas más lúdicas y que nos aporten placer y serenidad. Cada uno tendremos nuestras preferencias y hábitos que nos relajan, pero si estás falto de ideas, hoy te damos algunas para que consigas desconectar del estrés diario.
Técnicas para relajarse en casa
Mantener un estado mental equilibrado es necesario tanto para nuestra salud psíquica como corporal. Es necesario si queremos mantener un estado de ánimo positivo y abierto a la felicidad. A veces no es fácil, pero no hay que dejar que los problemas de la vida cotidiana afecten ese positivismo. Cuando nos dejamos llevar por el pesimismo y la infelicidad, los problemas crecen de tamaño y se multiplican en cantidad.
Lo que hoy os contamos no son técnicas para relajarse en sí, de ellas hemos hablado en multitud de ocasiones. Se trata más bien de pequeños hábitos o costumbres que nos pueden ayudar a sentirnos más tranquilos en general. Y así, también descansar mejor.
Sonríe y ríe
La risa es una de las mejores forma de relajarse. Puedes ver una película divertida, quedar con algún amigo que te haga reír, jugar a algo divertido… Hay muchas cosas que pueden provocar la risa y lo cierto es que todos nos sentimos mejor tras una carcajada.
Y no solo eso, hay estudios que demuestran que al sonreír liberamos endorfinas, por lo que si sonríes más a menudo, te sentirás más feliz.
Pasa tiempo con tu mascota
Los animales son grandes compañeros de relajación. Puedes jugar con tu perro, salir a pasear o simplemente tiraros juntos en el sofá. Se ha demostrado que las mascotas ayudan a liberar estrés y nos hacen sentir más relajados.
Ten algún hobby placentero
Todos podemos encontrar alguna actividad que nos gusta y nos resulta placentera. Leer, hacer un puzzle, cocinar, restaurar algún mueble, tejer… las posibilidades son infinitas. En realidad se trata de ocupar la mente en algo que nos produce tranquilidad y sosiego. Busca un hobby (o varios) y disfruta de tu tiempo.
Aprende a priorizar
A veces las tareas diarias son tantas que nos ofuscamos y no somos capaces de hacer ni la mitad. La realidad es que ni todas tienen la misma importancia ni la misma urgencia. Coge un papel y haz una lista, de más a menos importante y más a menos urgente, y empieza a tachar tareas de una en una. En menos de lo que piensas habrás terminado con todo lo urgente y tendrás tu mente libre y preparada para relajarse.
Deja de sentirte culpable
Uno de los sentimientos que más a menudo impiden que nos relajemos es la sensación de culpabilidad. ya sea por cosas que han pasado o por tareas que hemos dejado sin hacer. Trata de liberarte de ese sentimiento. En cuanto al pasado, no puedes hacer nada, tan solo aprender para el futuro. Y en cuanto a las tareas sin hacer, volvemos al punto anterior, prioriza y no dejes cosas urgentes en el tintero.
Encuentra tu lugar tranquilo
Todos deberíamos disponer de un lugar en casa donde poder estar tranquilos. Puede ser una habitación, una butaca, o una esquina en el jardín. Incluso el cuarto de baño puede ser un lugar donde encontrar esa tranquilidad que necesitas. Sea donde sea, dedícate al menos cinco minutos cada día para poder disfrutar de esa calma, visualiza algo que te proporcione paz, ya sean olas del mar rompiendo, el canto de los pájaros o cualquier cosa.
Recuerda que todo se afronta de mejor manera cuando nuestra mente está despejada y tranquila. Prueba estas técnicas para relajarse y cuéntanos.
