En otros posts os hemos relatado diferentes métodos para relajarse en casa. Todos ellos funcionan y cada cual ha de encontrar el que mejor se adapta a su personalidad. Sea cual sea, los métodos para relajarse funcionan mejor en un ambiente ordenado y libre de trastos y suciedad. A menudo no somos conscientes de lo que la decoración de nuestros hogares provoca en nuestro ánimo. Una casa a la que no se ha prestado atención puede ser otra fuente de estrés. Y no solo en cuanto a la decoración: olores, sonidos, colores y desorden. Con la llegada del buen tiempo, quizá ha llegado la hora de abrir las ventanas y ponerse manos a la obra para deshacernos del desorden y de todos esos elementos que nos producen estrés y añadir aquellos que nos transmiten serenidad.
Menos es más, y sobre todo en términos del hogar y lo que nos rodea. Un ambiente desordenado y sobrecargado puede crear en nosotros sentimientos de fatiga o de estar sobrepasados. Esto se debe a que nuestro subsconsciente trata de poner orden en ese caos. Si tu casa está desordenada, tu mente estará dando vueltas al trabajo que tiene que hacer para remediarlo. Si es la casa de otra persona, serás incapaz de sentirte cómodo del todo.
No puedes ir limpiando y ordenando las casas de tus amigos, pero sí puedes mejorar la tuya. A menudo, pequeños pasos producen grandes resultados. No pasa nada con un poco de desorden, pero en el momento en que empieza a resultarte molesto, deberías ponerle remedio.
Mejora tu casa para que los métodos para relajarse funcionen
Algunos trucos para conseguir una casa ordenada
No es necesario que el primer día ordenes la casa completa. Se trata de adquirir una rutina y dedicar 15 minutos diarios a recoger, ordenar y desechar aquello que nos molesta o es innecesario.
Ataca cada vez una habitación. Y no empieces otra hasta que hayas terminado. Notarás la satisfacción que supone ver una estancia en orden y te sentirás más motivado a conseguir lo mismo en el resto de la casa.
Aprovecha momentos como cuando hablas por teléfono para ordenar pequeños espacios. Tu mesa de estudio o trabajo, el interior de un cajón pequeño…
Y mientras tanto, escucha música. Sentirás más energía y cómo el tiempo pasa más deprisa.
Una vez que hayas eliminado el desorden de tu casa, los métodos para relajarse serán más efectivos. Para mantener el orden, lo ideal es que a partir de entonces establezcas sistemas de organización que lo mantengan. Así tu hogar siempre será el remanso de paz que necesitas.
Usa el color de forma consciente
Puede que te guste el naranja chillón o el verde fosforescente. O puede que prefieras los colores neutros. En cualquier caso hay que tener en cuenta que el color influye en el estado de ánimo. Puede hacer que estemos más alegres o tristes, que tengamos más apetito o que nos pongamos nerviosos y alerta. Lo importante es rodearse de los colores que provocan en cada uno sensaciones de bienestar y felicidad.
Rodearnos de los colores que nos gustan es agradable, y podemos empezar por pequeños toques en mobiliario o accesorios o realizar un gran cambio pintando la casa entera.
En el dormitorio, una buena idea es comenzar cambiando los textiles. Unas sábanas diferentes, unos cuadrantes nuevos… Pequeñas dosis de color que hagan el espacio más agradable para ti.
Un pequeño consejo: no abuses de los colores, demasiados diferentes pueden crear un efecto de desorden y caos.
Practica métodos para relajarse cada día
Una vez que has conseguido que tu casa sea el templo de paz que necesitas para sentirte relajado, deberías dedicar una rato cada día a practicar los distintos métodos para relajarse. Hay personas que prefieren la meditación, otras la respiración profunda y otras practicar hobbies como tejer, escribir o leer.
Lo importante: encuentra lo que mejor funciona para ti y dedícate una rato cada día. No solo mejorará tu estado de ánimo, te sentirás con más energía y mejorará tu descanso. Además, estarás en mejor disposición de afrontar los asuntos y problemas diarios.
