Cuando un dormitorio pasa a ser una obra de arte.
La controvertida artista británica Tracey decidió exponer la cama donde dio rienda suelta a sus excesos con el alcohol y las drogas, con el titulo de «My bed", convirtiendo la obra en un icono del arte conceptual.
El entonces comprador Charles Saatchi ha decidido que es el momento de vender la obra en la prestigiosa casa de subastas de Londres: Christie’s.
Las tasaciones realizadas por los especialistas y el propio propietario de la obran pueden llegar a los 1.4 millones de euros, con lo que convertiran a la famosa cama tamaño King Size con todos los añadidos de sus excesos: botellas de alcohol, drogas, ropa interior sucia, condones…etc… en la cama más cara del mundo.
Lo más curioso es que no es la primera cama de la artista que se vende como obra de arte, ya en el 2002 el mismo marchante Saatchi vendio por 578 mil euros otra cama de Tracey conocida como «To meet My past" totalmente opuesta a la actual.