Que gran invento es el botón para retrasar la alarma del despertador, hasta que vuelve a sonar claro. Le volvemos a dar otra vez para conseguir arañar otros 10 minutos a nuestro despertar y ver si así nos levantamos menos agotados.
Pero la realidad es que cuanto más usemos el botón para retrasar la alarma del despertador, más cansados nos levantaremos. Para entender el porque hay que recordar un poco el ciclo del sueño:
- Fase I: Adormecimiento
- Fase II: Sueño ligero
- Fase III: Transición
- Fase IV: Sueño Delta
- Fase V: REM
Cuando nos despertamos utilizando el despertador, normalmente rompemos el ciclo del sueño antes de tiempo, por lo que nos sentimos más cansados de lo normal. Pero dado a que nuestro cuerpo esta más o menos acostumbrado a esa hora de despertarse esta más o menos graduado ello. Pero ¿que pasa cuando le damos al botón para retrasar la alarma del despertador?
Pues que nuestro cuerpo vuelvo a empezar el ciclo del sueño, el cual se ve interrumpido escasos minutos después, distorsionando cada vez más el ciclo de sueño de nuestro cuerpo.
Es preferible poner la alarma del despertador 30 minutos después que ir acumulando pequeñas e inacabadas siestas que lo único que van a provocar es que nuestro cuerpo se sienta aun más cansado de lo que esta.
Esta claro que lo más conveniente es acostumbrar a nuestro cuerpo a dormirse a una hora y a despertarse a otra, lo cual con el tiempo haría que el despertador no fuera necesario y así nuestro cuerpo regularía nuestras fases del sueño para despertarnos con todas nuestras energías. Ya que vivimos siempre con estrés y tiempos medidos, al menos podemos mejorar nuestro descanso si nos despertamos a una hora y no en pequeños intervalos.