Según nos vamos haciendo mayores puede que nos empiece a costar dormir a veces. Los hábitos durante el día, las preocupaciones… todo influye a la hora de conciliar el sueño. Todos en algún momento nos preguntamos cómo dormir bien cada noche.
Cómo dormir bien todas las noches
La importancia del equipo de descanso
Son muchos los factores que influyen a la hora de dormir. No podemos tener control sobre todos ellos, pero sí sobre nuestro equipo de descanso. Elegir el colchón ideal para cada persona es importante, de ello dependerá que nos sintamos cómodos. También la almohada es fundamental en este sentido.
También es fundamental crear un ambiente propicio. Apaga los aparatos electrónicos, evita el uso de tabletas y ordenadores en la cama. Asegúrate de que la temperatura ambiente es la ideal.
Cuida la alimentación
Lo que comemos afecta a nuestro descanso. Una cena copiosa puede hacer que no durmamos bien. Las digestiones pesadas harán que estemos incómodos y que nos cueste conciliar el sueño. Trata de cenar ligero y al menos dos horas antes de acostarte.
Mantente activo
Durante el día, mantén un buen nivel de actividad. El deporte practicado en la primera mitad del día te ayudará a descansar mejor por la noche. Sin embargo, realizar una actividad física poco antes de ir a dormir puede tener justo el efecto contrario. Es mejor madrugar para ir al gimnasio que hacerlo después de trabajar si queremos dormir mejor.
No está mal echarse una siesta a mitad del día, pero si nos cuesta dormir por la noche lo mejor es que sea corta o evitarla.
Establece rutinas
Al igual que pasa con los niños, el establecimiento de unas rutinas antes de la hora de acostarse ayuda a conciliar el sueño. Leer un libro antes de dormir, darse una ducha caliente… cualquier cosa que nos ayude a relajarnos puede convertirse en un buen hábito antes de acostarse.