La seguridad de los bebés suele ser lo primero para los padres. Son tan pequeños y frágiles que necesitan toda la atención y cuidados. Ni siquiera son capaces de cambiar su postura cuando duermen, por lo que hay que estar pendientes de que no se giren sin querer. Por suerte hoy en día contamos con diversos complementos para sus cunas y carritos que nos ayudan en la tarea. Es el caso del cojín antivuelco, cada vez más utilizado por padres y puericultores.
Como siempre, es el pediatra el que puede aconsejar cuáles son los mejores cuidados para cada bebé. Pero en general, todos deberían utilizar un cojín antivuelco en los primeros meses de vida. Estaremos proporcionando seguridad a nuestro bebé, y nosotros ganando tranquilidad a la hora de descansar.
Usar un cojín antivuelco
¿Por qué utilizar un cojín antivuelco?
Como decíamos, la seguridad de los bebés suele ser lo que más preocupa a los padres. Que estén cómodos, alimentados, limpios y sin correr ningún peligro. No son pocos los padres, sobre todo primerizos, que durante la noche se despiertan continuamente para comprobar que su bebé está bien. Oímos y leemos muchas historias sobre bebés que han sufrido accidentes, problemas respiratorios… Eso nos hace estar intranquilos, dormir menos y mal, y además, de alguna manera transmitir esa intranquilidad al bebé.
Hay varios motivos importantes por los que utilizar in cojín antivuelco. Seguramente tras leerlo, y si estás esperando un bebé, será una de las primeras compras que realices. Y te aseguramos que no te arrepentirás.
Evitan la muerte súbita
También conocido como síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) o muerte de cuna. Esta es una de las cosas que más preocupan a todos los padres es la muerte súbita. Si bien las causas de este suceso no suelen estar claras, sí se conoce qué podemos hacer para minimizar el riesgo. Controlar la postura del bebé es importantísimo en este sentido, ya que evitaremos que se produzcan accidentes como asfixia o atragantamiento.
Evitan la plagiocefalia
Los cojines antivuelco sujetan al bebé pero dejan que su cabecita se mueva libremente. Esto les permite cambiar de postura fácilmente, favoreciendo el desarrollo normal del cráneo. En cualquier caso, en los primeros meses de vida, conviene movilizar la cabecita del bebé de forma regular, ya que puede que aún no sean capaces de girarla por si solos.
Previenen accidentes
Gracias al cojín antivuelco, el bebé no puede rodar sobre un costado o realizar un movimiento que le haga caer. No son pocos los padres que cuentan que al menos una vez su bebé se ha precipitado de la cama cuando lo cambiaban o realizaban cualquier otra tarea, dando por hecho que al ser tan pequeños no van a rodar sobre sí mismos.
Tranquilidad
Como decíamos antes, un cojín antivueco tiene muchas ventajas, una de ellas es la tranquilidad que aporta a los padres. Recibir un bebé es un momento muy feliz y estresante a la vez. Si sabes que tu pequeño está completamente seguro, ganarás en relajación y aprovecharás más los tiempos que tangas para descansar.
Manual de uso del cojín antivuelco
Los cojines antivuelco están compuestos por dos cojines unidos por una banda de tela. Suelen tener un largo de unos 24 centímetros, y un ancho de 35. Cada uno de los cojines en los extremos, actúa como barrera protectora evitando que el bebé pueda adoptar posturas perjudiciales.
Su uso es muy sencillo, basta con colocar al bebé entre los dos cojines. Así estaremos evitando posibles asfixias, atrangantamientos, accidentes…
En cuanto a la edad recomendada para usar y dejar de usar un cojín antivuelco hay distintas opiniones. Todo el mundo coincide en que desde el nacimiento debe utilizarse, pero a la hora de retirarlo hay opiniones diversas. Lo mejor siempre, es consultar al pediatra. Aprovecha una revisión para plantearle todas esas dudas.