Colchón mojado: ¿Qué hacer con él?

Los accidentes ocurren. Un vaso que se derrama, un «escape" nocturno… Nuestro colchón a veces sufre este tipo de percances, que si no se atajan de forma adecuada pueden tener unos efectos devastadores en nuestro descanso. Un colchón mojado requiere atención si queremos que su vida útil y su nivel de confort no se vean comprometidos. La buena noticia es que si actuamos con rapidez, podemos evitar que nuestro colchón se deteriore o adquiera malos olores.

En el post de hoy te contamos cómo actuar ante un colchón mojado paso a paso.

Secar un colchón mojado paso a paso

Lo primero que hay que hacer ante un colchón mojado es actuar con rapidez. Cuanto antes comencemos con el proceso, mejor serán los resultados y mayores posibilidades tendremos de que nuestro colchón no sufra ningún deterioro.

Si tu colchón se ha mojado, estos son los pasos a seguir.

Retira la ropa de cama

Antes de nada, quita la ropa de cama y métela en la lavadora. Dependiendo del líquido que se haya derramado puedes necesitar algún detergente específico, aunque por lo general será suficiente con tu jabón habitual.

Mueve el colchón

Asegúrate de ponerlo en una posición en la que puedas acceder a toda su superficie sin subirte a él. Despégalo de las paredes y sepáralo de la base, sobre todo si esta es tapizada o de muelles.

Elimina el exceso de líquido del colchón

Con la ayuda de toallas, toallitas absorbentes o trapos de algodón absorbe todo el líquido que puedas del colchón. Presiona un poco la mancha sin frotar y cambia los trapos todas las veces que sea necesario hasta que no absorban más humedad.

El exceso de humedad favorece la proliferación de bacterias, moho y ácaros que pueden dañar el colchón. Y no sólo eso, además son nocivos para nuestra salud.

Tratar la mancha

En función del tipo de mancha, habrá que tratarla con algún producto. Si fuera agua el líquido derramado no sería necesario. Por lo general, un trapo o cepillo humedecidos con agua y jabón neutro será suficiente. Pero en el caso de orina, por ejemplo, es necesario limpiar a fondo para evitar cercos y malos olores.

En las manchas de orina se recomienda utilizar un limpiador enzimático suave. Se aplica ligeramente el limpiador sobre la mancha y se deja actuar unos minutos. Hay que tener cuidado de no utilizar producto en exceso, para no humedecer de nuevo el colchón demasiado. Pasado ese tiempo, se va frotando ligeramente con un paño húmedo desde los bordes de la mancha hacia el centro hasta su eliminación.

También funcionan bien mezclas caseras de vinagre blanco, agua y unas gotas de detergente. Pon la mezcla en un pulverizador y ve poco a poco frotando la mancha desde fuera hacia dentro.

Para las manchas de sangre será necesario un limpiador que incorpore peróxido de hidrógeno.

En cualquier caso, antes de aplicar ningún producto, consulta las recomendaciones de limpieza del fabricante del colchón. Y aún así, siempre es recomendable probar el método elegido en una zona poco visible para comprobar que ni la tapicería ni el colchón se dañan.

Iniciar el secado al aire

La mejor forma de secar un colchón es sacarlo al exterior para que se seque al aire. Pero sabemos que no siempre es posible o que en ocasiones no es lo más higiénico dependiendo del entorno. En esos casos, se puede ayudar al secado con aire seco, y siempre frío. Ten en cuenta que el calor favorece la propagación de bacterias y la fijación de muchas manchas. No vuelvas a poner la ropa de cama ni a utilizarlo hasta que esté completamente seco.

La mejor forma de evitar un colchón mojado

Si bien un colchón mojado no es el fin del mundo, siempre es mejor evitar que se moje. Por eso en Colchón Exprés recomendamos siempre el uso de un protector de colchón impermeable y transpirable. Tu colchón estará totalmente protegido frente a líquidos y manchas sin afectar de ninguna forma a tu descanso.